16
Nov

Te contamos qué aspectos hay que tener en cuenta a la hora de elegir una u otra distribución.

ASPECTOS FUNCIONALES:

  • El triángulo de trabajo. Es algo conocido y casi todos los distribuidores de cocinas lo tienen en cuenta en sus diseños. La zona de cocción, la de lavado y la de almacenamiento funciona mejor si forman un triángulo en el que las dos primeras zonas estén en una misma línea de trabajo o formando 90º.
  • Se necesita espacio a ambos lados de la zona de fuego y también de la de lavado. Éste es un error que sí se comete a menudo: pegar la vitro o el fregadero a una pared o dejarlos al borde de la tira de amueblamiento. Hay que intentar evitarlo a toda costa.
  • El lavavajillas tiene que estar cerca del fregadero. Antes de colocar los platos en el lavavajillas solemos enjuagarlos un poco, así que conviene que estas dos cosas no estén demasiado alejadas.
  • La basura, especialmente la orgánica, está mejor cerca de la zona de cocción. Generalmente es ahí donde se generan los residuos. Agradecerás poder deshacerte pronto de ellos y no tener que pasearlos por toda la cocina.
  • Si tu cocina tiene forma de L o de U, tendrás muebles haciendo esquina. Esos espacios son poco prácticos pero tampoco tiene sentido condenarlos. Eso sí, ten mucho cuidado con lo que pones al lado. Uno de los módulos que coloques junto al esquinero debe facilitarte el acceso a esa zona más escondida. Puedes colocar a un lado el horno, el lavavajillas, la lavadora o cajones, siempre que en el otro dejes una puerta que te permita acceder a la esquina sin problemas.
  • Reserva un espacio para los pequeños electrodomésticos. Si no lo haces, la tostadora, el exprimidor, la cafetera, la plancha, la yogurtera, la batidora, la panificadora… quedarán a la vista y acabarán ocupando todo tu espacio de trabajo. Si les reservas un módulo de suelo a techo, tendrás todos estos aparatos perfectamente ordenados y ocultos; sólo tendrás que abrir una puerta para usarlos con comodidad. Eso sí, recuerda dejar unas cuantas tomas de corriente previstas en la pared en la que coloques ese módulo.
  • Los cajones grandes y los módulos con bandejas extraíbles multiplican la capacidad de almacenamiento. Si optas por piezas de este estilo, podrás reducir el número de módulos e incluso prescindir de los muebles en altura, a menudo poco prácticos por ser menos accesibles.
  • Si quieres tener el fregadero frente a la ventana (algo que nos pedís a menudo, suponemos que influidos por las películas americanas) ten en cuenta que el grifo no debe interferir en la apertura de las hojas. Si no puedes evitarlo, la solución no es cambiar las ventanas a correderas. Reflexiona sobre si realmente es para ti tan importante poder mirar a la calle mientras coges agua para beber o para regar las plantas. Porque seamos realistas, ya casi nadie friega los platos en el fregadero. Y si lo haces, necesitarás un escurreplatos que la ventana no te dejará colocar. No sacrifiques cosas realmente importantes por pequeños detalles, manías o ideales que a la larga, no son realmente tan maravillosos como imaginabas al principio.